Jun 30, 2014 Dani Arrébola Críticas 0
Dir.: James Gray
Pro.: James Gray, Christopher Woodrow, Greg Shapiro Gui.: James Gray, Ric Menello
Int.: Marion Cotillard, Joaquin Phoenix, Jeremy Renner
Quinta película en veinte años de James Gray, un director y guionista que se toma su carrera con calma; y con acierto, porque ha conseguido un casi unánime reconocimiento: al menos de la crítica. Little Odessa –premios para él y para Vanessa Redgrave en Venecia-, La otra cara del crimen, La noche es nuestra y la magnífica y sorprendente Two lovers –con Joaquin Phoenix, a partir de la segunda, como actor-fetiche-, son obras muy sugerentes, siempre con personajes intensos y realistas protagonizando argumentos llenos de interés y, muchas veces, de emoción.
Y con evidentes referencias familiares en todas ellas, sobre todo en lo que toca al vínculo fraternal. También ahora: Ewa y Magda Cybulska son dos hermanas polacas que huyen de la guerra europea; sus padres han sido asesinados, y huérfanas y sin recursos, llegan a Estados Unidos. El barco las deja en la isla de Ellis, la dramática aduana en la que los inmigrantes son detenidos, vigilados e inspeccionados uno a uno mediante exhaustivos controles legales, médicos y hasta morales.
Muy cerca de la isla, la Estatua de la Libertad parece saludar la llegada de los viajeros; pero para Ewa y Magda no hay una mirada acogedora. Magda está enferma de tuberculosis y es descubierta inmediatamente y puesta en cuarentena –encerrada, en realidad- en el hospital. Y Ewa, acusada de conducta inapropiada, va ser deportada y devuelta a su país. Entonces aparece en escena Bruno Weiss, un hombre misterioso y oscuramente protector, que ofrece a la joven facilitarle la salida de la isla y buscarle alojamiento en Nueva York. Y también trabajo. Bruno es –Ewa lo va descubriendo- empresario de teatro y mánager de actrices y bailarinas. Empresario y mánager quiere decir, además, alguna otra cosa. La joven, cuyo interés principal estriba en sacar a su hermana de su encierro, no consigue salir de la desesperanza; su desgracia solamente ha cambiado de cara. Hasta que aparece en escena Emil, primo de Bruno y también artista… más o menos de la misma categoría. Su espectáculo de magia no es deslumbrante, precisamente; pero sí supone un rayo de luz para Ewa en medio de las tinieblas en las que vive. Emil se siente inmediatamente atraído por ella; su belleza y su soledad lo conmueven, y trata de ayudarla. En realidad, lo que hace es colocarla en medio de la vía, con dos trenes que vienen en direcciones opuestas, de distinta potencia pero con la misma intensidad.
Las películas de Gray, como decía, están todas muy bien escritas, y la calidad de sus imágenes es notable. En El sueño de Ellis, a las estupendas interpretaciones del trío protagonista se une una fotografía que alcanza las más altas cotas de su carrera: el maestro Darius Khondji –el responsable de Seven, Midnight in Paris y Amor, por ejemplo- utiliza una paleta expresionista, llena de matices, claroscuros y tonos ocres como la vida de las gentes que pueblan el relato: la bruma –no solo física- de la isla, las luces amargas de la noche neoyorkina, la penumbra tras el escenario, el peso de las sombras rasgadas por algún brillo insuficiente.
Contemplada así, desde el punto de vista estético, la película resulta irreprochable. Los problemas vienen más bien del ritmo del relato y de la intensidad de la narración, que puede llegar a ser sofocante en algunos momentos. El recorrido de la joven Ewa por las calles de Nueva York y su desamparo entre el omnipresente Bruno, astuto y manipulador, y el ilusionista y bienintencionado Emil está descrito con extraordinaria minuciosidad; tanta, que la historia se ralentiza y pierde emoción. Los personajes viven y sufren una pasión que el espectador, lamentablemente, no llega a compartir en su totalidad.
Pero sin duda sí queda clara la intención de James Gray, avalada por la historia y tan cercana aun a la realidad: plasmar las complicaciones, las angustias y las esperanzas contenidas en una aventura humana tan dolorosa y difícil como la inmigración.
Ago 30, 2023 0
Feb 17, 2023 0
Nov 30, 2013 0
Abr 07, 2013 0
May 27, 2023 0
En las repescas de la Sección Oficial que el festival de...May 26, 2023 0
La dupla Loach-Laverty está de regreso con un film que...May 26, 2023 0
El festival de Cannes de 2023 presume de tener otra robusta...May 25, 2023 0
En la hermosamente minimalista “Perfect Days”, Wim...May 25, 2023 0
Los nuestros son tiempos de muchas ocurrencias y poco...