Nov 28, 2017 Dani Arrébola Mundo APTC 0
Por Cristian Quilis
Por lo general, uno se sorprende al ver cómo Netflix consigue llevar a buen puerto numerosas producciones de gran calibre. Es el caso de Máquina de Guerra, en el que todos vimos sorprendidos a una estrella como Brad Pitt protagonizando el tráiler del producto que dicha plataforma nos estaba presentando. Y en una época en el que la crítica política está a la orden del día, el proyecto parecía ser, cuanto menos, prometedor. David Michod, director de Animal Kingdom, nos “traduce” el libro del periodista Michael Hastings, ‘The Operators: The wild & Terrifying Inside Story of America’s War in Afganistan’ contándonos la historia del general Stancey McChrystal, representado por Glen McMahon en el filme, y su cruzada por ganar la enquistada guerra que EEUU libra en oriente.
Máquina de Guerra nos plantea, de modo parecido al que lo hizo La Gran Apuesta, con la que, de hecho, comparte a Brad Pitt como productor, una explicación al conflicto de Afganistán utilizando un acertado tono cómico. Y es que, a lo largo del metraje se propone una situación general, cuanto menos, absurda: desde el propio McMahon, interpretado por Brad Pitt, como la caricatura del hombre nacido por y para la guerra, hasta ciertas conversaciones y situaciones que nos llevan a cuestionarnos si son motivo de risa o de crítica. Estilo que nos puede recordar vagamente a El Gran Dictador, donde nos proyectaban, de manera explícitamente más ilógica, lo descabellado de ciertas personalidades políticas que podemos encontrar en la realidad. Y esto es, efectivamente, una de las grandes virtudes de la película: darnos a entender lo absurdo que puede resultar un escenario tan real como una guerra, donde se intenta convencer al invadido (en este caso, Afganistán) que todo destrozo causado es por su propio bien.
No obstante, es la falta de dramatismo lo que falla estrepitosamente en el resultado general de la película. La duda, en ciertos momentos, de cargar la narración con algo que no haga plantearte que no sea un intento de caricatura, pesa en lo que son dos horas de metraje que tienen el peligro de volverse tediosas para aquellos que no soportan seguir un trasfondo tan serio detrás de un planteamiento satírico.
Máquina de Guerra es, en resumen, una buena lección de historia que no duda en mostrarse crítica con los acontecimientos que exhibe. Un intento inteligente de mostrarte lo absurdo de una manera absurda. Pero que falla en ciertos aspectos esenciales que podrían haber redondeado un producto de difícil recuerdo con tan buena base. Y, a la vez, nos evidencia el camino de Netflix para desarrollarse en un sector que creíamos reservado únicamente a las grandes empresas cinematográficas. Y eso es siempre un motivo de celebración.
Feb 10, 2021 0
Ene 22, 2021 0
Oct 21, 2019 0
Feb 18, 2019 0
Oct 29, 2018 0
Jul 05, 2018 0
Dic 27, 2020 0
Dani Arrébola, director de Apetece Cine, charla con Aitor...Dic 27, 2020 0
¡Sí! Tal y como lo leéis: El Presidente saliente Donald...Dic 07, 2020 0
Por Pau Sauri Soriano Walter Proska, El desertor Dirigida...Nov 29, 2020 0
Por Dani Arrébola Lo que son las cosas. Escondido,...Nov 13, 2020 0
Por Dani Arrébola Charlamos con Laura Rubirola...